En primer lugar, tengo que decir que el título del libro me cautivó desde que lo escuché, y esa fue la razón principal para comprarlo, y para leerlo (que no es lo mismo). Resultó que el tema principal del libro es exactamente lo que dice el título. Todos conocemos personas que podríamos pensar que no eran precisamente los más inteligentes, y se encuentran en una posición financiera mucho mejor que la nuestra. Y es en ese momento que nos hacemos ésta interesante pregunta.
Según lo que dice el autor, la mayoría de nosotros somos lo que él llama personas LQC: “Lado Correcto y Quebrado”. En teoría hemos hecho todo lo que se nos ha dicho, fuimos a estudiar, nos esforzamos por sacar buenas calificaciones, nos comportamos bien en el colegio, seguimos las reglas “del juego”, etc., y sin embargo, vivimos con problemas financieros, estamos endeudados, no podemos tener las cosas materiales que quisieramos (y que creemos que merecemos).
El fondo del libro son los secretos para alcanzar la riqueza:
Pon cabeza abajo todo lo que siempre pensaste sobre hacerte rico: La idea es cuestionarte todo lo que has pensado sobre éste tema. Muchas veces estamos de una forma condicionados por nuestros pensamientos, y los mismos no nos dejan avanzar, como por ejemplo creer que haber sido un buen estudiante es garantía para lograr “seguridad financiera”
Sigue las leyes espirituales de la riqueza: Estas son:
Dar: Muchas veces nos encerramos tanto en nuestros propios problemas que nos olvidamos de dar a los demás. Y ten en cuenta que lo más importante que puedes dar a los demás es tu tiempo, así que no hay excusa de que tu situación financiera no te lo permite
Recibir. Muchas veces nos cuesta recibir, agradecer, valorar y apreciar lo que se nos da, pero también muchas veces no estamos seguros de merecer lo que recibimos, y eso es algo que hay que aprender a hacer
Una meta te hace rico, más de una te deja en la quiebra: Es importante plantearte tu misión personal, y vivir de acuerdo a ella. A partir de tu misión, puedes establecerte objetivos de más corto plazo, para irlos alcanzando poco a poco y que te vayan acercando a tu misión personal. En éste punto menciona que tu misión debe contener 3 elementos que son muy importantes:
Valores: Cómo quiero que me recuerden
Pasión: Qué me apasiona y en qué soy bueno
Acción: Actividades diarias que puedo realizar
Para ser rico mañana, debes vivir como rico hoy: Este es un punto que tiene su lógica, y no es el primer autor que leo que propone la misma idea. Dice que puedes practicar a ser rico, por ejemplo, ir a un buen restaurante y pedir el plato más caro, ir al distribuidor de automóviles y realizar una prueba de manejo del carro de tus sueños, son algunos ejemplos de formas de practicar a ser rico. Obviamente deberás hacerlo sin comprometer tu situación financiera
Los idiotas ricos no se hacen ricos solos: Existen OP (otras personas), que pueden ser:
Tóxicos: Personas que pueden tener buenas intenciones, pero no te aportan. Muchas veces te quieren “poner sobre aviso”, de algunas cosas, porque ellos ya lo intentaron antes y fracasaron, o porque se encuentra en su zona de confort, o porque son los famosos ladrones de sueños
Facilitadores: Pueden aportar su experiencia, ideas, tiempo o dinero, y son personas de las que te conviene rodearte
Equipo de mis sueños: Es el equipo ideal por el cual te rodearías, si tuvieras que hacerlo. Puede incluir tu asesor financiero y fiscal, tu abogado, tu coach, tu asesor inmobiliario, etc
Todo es cuestión de tus activos: Los activos pueden ser bienes raíces, acciones y negocios
Actúa: Cada día debes realizar pequeñas acciones, que te acerquen a tus metas. Puede ser una pequeña acción que te tome 20 minutos realizar, pero en algo has avanzado hacia los objetivos que te has planteado
Transcribo a continuación la parte que me más me gustó, y considero que representa la idea central del mismo:
“Al comienzo de éste libro hubo un tipo que pasó a toda velocidad en un Cadillac o en un Porsche nuevecito mostrando su Rolex. Lo reconociste como el idiota que reprobó en la escuela, mientras que tu estudiaste mucho y sacaste puros veintes. Recuerdas que mientras estabas sentado en tu auto de ocho años de antigüedad y veías la hora en una baratija de reloj preguntaste: “Si soy tan listo, ¿Por qué ese idiota es rico y yo no?”.
“¿Quieres saber la respuesta? Porque ese tipo no se preocupaba por sacar puros dieces. Después de reprobar consiguió trabajo de mesero. Sonrió mucho. Consiguió excelentes propinas. El día que te graduaste de la secundaria él compró su primer duplex. El día en que recibiste tu pluma corporativa por diez años de trabajo él ya estaba retirado. ¿Qué lo hizo un idiota rico? La acción.”
Creo que ésto resume el tema central del libro, el cual, desde mi punto de vista, es muy entretenido, y te puede dejar algunas ideas que te servirán para motivarte a buscar el camino hacia la libertad financiera.
Espero que te decidas a leerlo, y que lo disfrutes como lo he hecho yo.LEUGIM
